miércoles, 17 de marzo de 2010

NoStAlGiA FaDiStA



Cierro los ojos, me tumbo en la cama, se entremezclan las culturas, desde la plaza Luis de Camôes me dirijo a Bairro Alto, Rua Atalaia, primera parada. Gente de todos los lugares, italianos, franceses, brasileños... por supuesto cientos de portugueses. Rua Diário de Noticias, "jà consigo ouvir os fados". Pequeñas tabernas empapeladas con pósters y fotografías pegadas en paredes y techos desde hace décadas, locales estrechos, ocupan los bajos de numerosos edificios practicamente en ruinas. Las calles caracterizadas por sus adoquines y pendientes. Es la esencia de Lisboa, Bairro Alto, es el núcelo nocturno de la ciudad, el punto de encuentro de los miles d estudiantes que alberga la capital lusa.

Buen ambiente, un vaso de sangría cargado de canela o una panaché (cerveza con sprite) acabas por acostumbrarte... Nuevas y cruciales amistades, muchas de las cuales con el tiempo, sólo formarán parte del decorado de este escenario bohemio y cosmopolita del que tuve el privilegio de empaparme durante nueve meses.

Nunca olvidaré a "Kumiku", entrañable japonesa, compañera y vecina de la habitación de al lado en la residencia Spru, donde me alojé durante mi año Erasmus. Imposible mantener una conversación totalmente fluida con ella, ni en inglés ni en español, la mejor manera de comunicarnos en portugués, pero sin duda su pronunciación mejoraba mucho al entonar los fados más populares de la cultura portuguesa. A medida que pasaban los meses, este curioso personaje de origen oriental era más reconocido por la cultura y los medios de comunicación portugueses. Orgullosa estoy de aparecer como extra en el reportaje que la Televisión lusa vino a grabar para plasmar un día en la vida de Kumiku. El ridículo que hice comiendo un espagueti japonés con los palitos lo cortaron en la emisión final.

Podría escribir cientos de blogs para plasmar mis nueve meses en Lisboa, muchos de los días que pasé fueron especiales e inolvidables. Emblemática y sin duda mi favoritaes la Torre de Belem, podría pasarme horas sentada en frente de ella, con el único fin de observarla. Cercana al Monasterio de los Jerónimos, preciosas vistas que puedes disfrutar aún más si acompañas el paseo con un tradicional y exquisito pastéi de Belém, la cantidad justa de una especie de masa brisa y la cantidad justa de crema recién hecha, para culminar un toque de canela. Vuelvo a cerrar los ojos y consigo apreciar el dulce olor de este manjar.

Mil y una noches en Docas, increíbles vistas al Tejo, lo mejor, poder dar por finalizada una noche memorable mientras tienes de frente unas espectaculares vistas acompañadas del amanecer.Mi barrio, si tuviera que volver la elección sería la misma, Praça do Comerço, instalado en la Baixa, Rua Augusta, !cuántos paseos, cuántos cafés!, el Browns, descubrimiento de la segunda etapa Erasmus.

Infiltradas en el Comboio para ir día tras día a la playa sin confirmar el cartâo. Total diez minutos de viaje no compensa pagar... Horas y horas de sol, esa luz tan clara que caracteriza la ciudad lisboeta, sus numerosos miradores, Chapitó, Mirador de Graça, Elevador de Santa Justa, Cristo Rei... imposible hacer mención y honor a todas las maravillas de nuestro vecino y amigo Portugal.
Gastronomía: Pastéis de bacalhau, bacalhau a bras o bacalhau dourado. Para terminar la estancia La festividad de su patrón San Antonio, el olor a sardina y a brasas impregna cada rincón de la capital.
El gran tesoro, las maravillosas playas que recorren toda la costa.
Seguiré contando cosas sobre mi segunda casa, la que me acogió con los brazos abiertos, me abrió los ojos, me impulsó a una nueva etapa de mi vida, me hizo reflexionar... y a la que sin duda volveré en más de una ocasión para "aproveitar e falar portugués com as minhas colegas, as Filipas". Profesor entrañable en la escola donde cursé mi último año de carrera, no le olvidaré, su bigote, su pipa y su peculiar olor, fruto de todos los cafés que bebía y el tabaco de pipa que fumaba. ¿Por qué Lisboa? ¿Por qué hoy? Gracias a la revista Gourmet's y a su sección "Escapadas Gourmets", pequeño artículo sobre el cosmopolita hotel "Bairro Alto Hotel".

2 comentarios:

  1. Me agrada ver como recuerdas con cariño tu último curso universitario en la maravillosa Lisboa y la nostalgia que te impregna su grato recuerdo.

    Fue sin duda una etapa muy bella de tu vida que nunca olvidarás y que espero marque la buena trayectoria humana y profesional a lo largo de tu vida.
    Papá.

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  2. Meu amor, enche-me o coração ouvir-te falar assim de Lisboa :)
    Sinto muito a tua falta, de todos os cafés que tomávamos, todas as coca colas, as meias de leite, as gargalhadas, as lágrimas que apareciam depois de uma conversa cheia de confissões... de tudo e mais alguma coisa!
    Volta o quanto antes, cá estaremos à tua espera!!

    Te echo mucho de menos mi espanolita,
    un beso muy muy grandeeeeeeeeee!
    Filipa (Pim)

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